Para los niños uno de los problemas de aprendizaje más comunes es  la dificulta para leer y la comprensión del lenguaje escrito. Por ejemplo, quienes padecen de dislexia tienden a confundir letras similares o presentan inconveniente para leer con fluidez y sin errores. También pueden tener dificultades con la comprensión lectora, la ortografía y la escritura.

 Otros problemas de aprendizaje en los niños son la disgrafía, lo cual se refiere a una serie de desafíos específicos de la escritura en la que afecta la habilidad necesaria para la escritura a mano, la mecanografía y la ortografía y la discalculia, que tiene que ver con los números y es la discapacidad del aprendizaje en matemáticas.

Las personas con discalculia tienen dificultades en matemáticas a muchos niveles, es decir, tienen problemas con conceptos importantes, como mayor y menor. Pueden tener dificultad para resolver ejercicios simples y con conceptos matemáticos más abstractos. Sin embargo, cabe decir que la mayoría de los niños y niñas afectados, poseen una inteligencia media o superior a la normal.

Algunas señales de las de los niños con problemas de aprendizaje en particular son las siguientes: Retraso en aprender a hablar, dificultad para rimar palabras, pronunciación incorrecta, dificultad para reconocer letras y cifras, incapacidad para pronunciar ciertas letras en palabras fáciles, confusión entre palabras parecidas y dificultad para seguir instrucciones.

_{¿Qué podemos hacer si nuestros niños tienen un problema de aprendizaje?}

Antes que nada, llevarlo al doctor para asegurarse de que ve y oye bien. Luego, buscar la opinión de un pediatra. Si los niños tiene problemas de aprendizaje, necesitarán todo el apoyo de sus padres y familiares más cercanos. Y recuerde que la inteligencia del pequeño no está poniéndose en duda para nada.

Pida la colaboración de los profesores para que, por ejemplo, los niños con estos problemas de aprendizaje, se siente en los primeros puestos del salón de clase y le den un poco más tiempo para terminar los trabajos. Sería bueno que el profesor le diera las instrucciones por escrito y de palabra, y que le hiciera los exámenes oralmente. Los niños con estos problemas son olvidadizos, así que no vendría mal tener una enciclopedia infantil en casa. Si es posible, también podrían disponer, sea en clase o en casa, de un procesador de textos con corrector ortográfico para hacer los trabajos, le caería muy bien al niño.

Existen diferentes tipos de especialistas que pueden evaluar si un niño o niña  tiene dislexia, incluyendo a los psicólogos escolares, psicólogos clínicos y neuropsicólogos. Estos especialistas realizarán una serie de pruebas para la dislexia, así como también pruebas en otras áreas para determinar con exactitud cuáles son las fortalezas y los retos del individuo.

Es muy conveniente que el niño disléxico lea en voz alta, que un adulto lea con él un ratito en el día, así podrá aconsejarlo y corregirlo. Lea usted primero y permita que él siga la lectura. Luego, lean el mismo texto a la vez. Acto seguido, pídale que lo lea él solo y que utilice una regla al pie de la línea que va leyendo. Si encuentra palabras difíciles, que las marque con un resaltador. Este ejercicio, no le tomará más de lo necesario.

Maneras en que usted puede ayudar a su hijo con la escritura, estas son algunas:

• Aprenda un ejercicio de dibujo para mejorar la escritura a mano.
• Escuche a un experto explicar cómo usar el software de dictado en un dispositivo móvil.
• Encuentre herramientas que pueden ayudar con la disgrafía.
• Vea un video sobre cómo diferentes sujetadores de lápiz podrían ayudar a su hijo.
• Pruebe técnicas multisensoriales para la enseñanza de la escritura a mano.

Los números pueden practicarse, por ejemplo, midiendo las cantidades de una receta de cocina, usando un metro en trabajos manuales o yendo de compras al supermercado. Las hojas cuadriculadas y los dibujos pueden servirle a la hora de resolver ejercicios matemáticos.

_{Todas las barreras pueden ser superadas}

Trate de desarrollar los puntos fuertes en los niños con problemas de aprendizaje, como cualquier destreza o talento que posea. Elogie y premie todo logro conseguido, por insignificante que parezca. Divida los trabajos en tareas pequeñas, de manera que el niño pueda ir alcanzándolas progresivamente, así aumentará su autoestima. Dibuje los pasos que debe seguir para realizar su tarea.